Ya estamos conectad@s. Y ahora, ¿qué?


Hola a tod@s,

Hoy voy a iniciar un meme y se lo voy a transferir  a @fmlopez48@mcimino@marcapersonal y @antoniodomingo con la esperanza de que inicie un largo viaje por la red y  se detenga en cuantas más posadas mejor para compartir y enriquecerlo.

Recibimos invitaciones, las enviamos, las aceptamos y, en algunas oportunidades, las rechazamos. Sin embargo, hay tantos filtros/objetivos como usuarios interconectados hay en las diferentes redes sociales y todos tan lícitos como el primero. Me voy a centrar, por simplificación con la de Linkedin.

Básicamente, hay tres alternativas o formas de proceder:

  • Visión cortoplacista: Una vez aceptada, la persona con la que nos hemos conectado nos envía una presentación de a qué se dedica y qué es lo que ofrece
  • Visión a largo plazo: Aún por descubrir
  • Visión a medio plazo: Te pones en contacto, transcurrido un plazo razonable, con tu contacto para explorar posibles oportunidades de negocio y/o colaboraciones

Esnobismo, moda, realidad, aprendizaje o negocio son algunos de los objetivos por los que nos subimos al carro de las redes sociales. Sin embargo, parece que éste último, el de hacer negocio, sea el cuarto oscuro de las redes sociales.

El mundo de las redes sociales y, por ende, sus usuarios, estamos aprendiendo cada día acudiendo a clase. Es evidente que las primeras lecciones no deben ser las de llevar a cabo negocio sino las de cómo escuchar, conversar y participar en ellas. Ahora bien, el programa formativo debería incluirlas en el segundo trimestre del curso, y nosotros, como estudiantes aplicados, estudiarlas.

¿Qué lección tomaste y cuál es tu experiencia? Ya estamos conectad@s. Y ahora, ¿qué?

Saludos,

Agustí Brañas

17 comentarios

  1. Gracias por invitarme a tu casa, siempre es un placer Agustí.

    Yo creo que las redes sociales son una herramienta para conseguir un fin: un mundo más conectado. Un mundo sin las barreras de las distancias o diferencias horarias.

    Los objetivos pueden ser personales o profesionales, y variados: compartir conocimiento, ampliar las perspectivas, encontrar colaboradores, proveedores, socios, amigos…

    Para que funcionen tienes que dar, dar y volver a dar, antes de esperar recibir nada a cambio. Siempre lo comparo con la tarea del agricultor: preparar la tierra, sembrar, regar, sulfatar… mucho trabajo, paciencia y amor antes de recoger el fruto. Esto es lo mismo.

    Y gracias a las redes sociales te conocí a ti, y entré en tu casa y opiné 🙂 Y seguiré!

    Un abrazo y enhorabuena por tu trabajo!

  2. Hola Agustí, si me permites yo voy a ser algo crítico conmigo mismo y seguro que con muchos de los que estamos en Linkedin.
    Sin una participación activa en lkd la red se convierte en simplemente un gran directorio de profesionales, con una información mucho más ampliada, eso sí.
    Y admitamos que sin un objetivo claro para estar ahí la cosa pierde bastante sentido.
    No soy sospechoso de no creer en las redes sociales, pero soy algo escéptico en cuanto a que puedan ser utilizados como un medio digamos rápido en el ámbito al que imagino sugieres. En cambio, por ejemplo, para reclutar candidatos pasivos es una buena herramienta. Por tanto, sí puede servir en determinadas ocasiones para «hacer negocio» como propones.
    Aún así, los habituales recelos y resistencias del mundo real encuentran su propio alojamiento en sitios como Linkedin, por modernas que sean las luces del cartel.

    Un abrazo
    Agustí López

  3. Hola Agustí:

    Coincido con lo que comenta tu tocayo, algunas redes sociales como linkedin pueden llegar a convertirse en directorios profesionales. La mayoría de las personas, entre las cuales me incluyo, no le sacamos todo el partido o las posibilidades que ofrecen las redes, bien por desconocimiento, bien porque el foco está fuera y la prioridad es otra.

    Poquito a poco.

    Un abrazo

  4. Así están las cosas. Estoy con todos. Esto es una carrera de fondo, pero el «problema» es que no sabes cuando termina. Como se suele decir disfruta del camino y no pienses mucho en el objetivo porque entonces es cuando mejor lo dejas correr.
    Personalmente creo que es un error pensar en las Redes y el 2.0 en términos de monetización porque, en parte por la misma necesidad de tiempo, lo único que consigues es «engañar» al mercado y crear expectativas demasiado altas o simplemente altas.
    Ah! y yo soy un heavy user de LinkedIn y estoy más que encantado. Eso sí, somos pocos, la mayoría son los del directorio (que por otro lado sirve de bien poco). No quiero ni imaginarme lo que sería un hilo con 200 respuestas interesantes a un tema.

    Así que para enfocarnos un poco: No hay recetas mágicas. No hay soluciones rápidas. No hay estrategias ganadoras. Estamos conectados y ahora, si llamas mi atención, me iré fijando que haces, te seguiré en tu blog o hablaré contigo en LI y si algún día surge algo en lo que encajas te llamaré. Pero si desapareces te olvidaré en dos días.

  5. Buenos días Agusti,

    Interesante el tema que planteas.

    Personalmente pienso que las redes sociales y profesionales requieren que tengamos una estrategia de acción, sin embargo, debemos tener claro que la interactuación y la conversación requieren inversión de tiempo de calidad sin que eso garantice que lleguemos a la meta esperada en un corto plazo de tiempo. Las redes son una herramienta que nosotros decidimos como usarla.

    Saludos,

    Juan

  6. Coincido bastante con el comentario de David, las redes sólo son un facilitador de conexión, sólo les podemos pedir eso: conexión. Lo demás depende de cada uno. Quiero decir, respondiendo a tu pregunta, estamos conectados y ahora cada uno hace lo que quiera/pueda/deba con su vida, sabiendo que esas conexiones pueden interceptar/amplificar/transformar lo que sea que hagas. La conexión no implica más que eso, no conlleva, de por sí, más valor que el propio valor de los nodos.
    Creo que aun hay que desmitificar las redes. Sólo son facilitadores, detrás están las personas, si la persona me aporta valor contactaré con ella, por LinkedIn, mail, fax o iré a buscarle a su oficina. Pero no sigo, lo dejo aquí hasta que me llegue el meme, de otro modo lo habré escrito todo aquí 😉

  7. Claro que se puede hacer negocio, y se puede colaborar a muchos niveles, pero requiere tiempo, conocerse, compartir …. es solo una herramienta, como el teléfono, solo que mucho más «grande», pero …. es una herramienta «humana» con sus virtudes y sus defectos, conviene no olvidarlo.
    Un abrazo ¡guapo!

  8. No sólo he hecho negocios, sino que los sigo haciéndolos, de hecho he hecho una pausa en un negocio actua, y que inicié en redes sociales, para comentar en este post. La misma red provee de la confianza y la transparencia que tan difícil resulta encontrar en la vida 1.0… Aquí la gente es más abierta y el acercamiento que se inicia con un tweet, pasa a convertirse en un par de correos, que en una semana, ya pasan a ser un contrato y ¡zas! otro negocio. Yo nunca pensé en hacerme autónomo luego de tantos años en multinacionales, y ahora he tenido que hacerlo debido a la demanda de personas interesadas en hacer negocios conmigo… la mayoría no me conoce en persona… Es el milagro de la 2.0… Bienvenidos sean los negocios en Red. 🙂
    PR

  9. Tenemos un absurdo sentido del ridículo y un gran complejo que actúa frenando nuestros impulsos naturales de entregar nuestra tarjeta en una convención o encuentro de networking, que actúa obligándonos a ser demasiado cautelosos en redes y medios sociales, que actúa haciendo que dejemos pasar oportunidades sin hacer nada para remediarlo.
    Una cosa es asaltar a la gente y, de buenas a primeras, «colocarles» la tarjeta o «espetar» el mensaje (nada recomendable ambas actuaciones) pero tampoco podemos pasarnos la vida acomplejados y dejando pasar oportunidades.
    Hemos de ser más naturales y dejar que nuestra esencia actúe, siempre con coherencia y cortesía, por supuesto.
    Gracias por tu aportación Agustí y por lanzar un debate muy interesante.

  10. Cada uno usa las redes a su gusto. A mi me han permitido contactar con profesionales de mi área, que a través de otros métodos es más lento. Tal vez sea un conocimiento superficial pero en algunos casos ya es contacto «presencial». Por otro lado, estoy más al corriente de las actividades, reuniones, cambios, escuchas lo que ocurre y más importante: te das cuenta de que no eres el centro, ni tu sector el eje del mundo, sino que estamos todos conectados. El beneficio depende de cada uno, si en el mundo 1.0 se ve el percal, en el 2.0 lo mismo, espero haber sido claro.
    Me ha parecido un buen post para reflexionar.
    Saludos,
    Óscar

  11. Las redes sociales y el 2.0 se basan en la confianza y la transparencia entre los contectad@s. Son una buena herramienta de desarrollo personal y empresarial.
    Gracias Agustí por tus aportaciones … 😉

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